¡Ya tenemos nombre para la peque! y mira que nos ha costado porque ya he cumplido las 38 semanas, pero me parecía una decisión que no podía tomar a la ligera. Poner el nombre a una persona es algo importante que le acompañará durante mucho tiempo. En esta ocasión no me refiero al nombre de verdad, ese también nos costó en un principio, pero ese lo tuvimos muy claro en cuanto llegó a nuestras cabezas.
Hablo de su nombre blogueril, ese nombre que utilizaré cuando hable de ella por aquí y por las redes. Su nombre de verdad no es un secreto, así que tampoco sería un desastre que se me escapara en alguna ocasión (espero que no), pero prefiero utilizar un seudónimo para mantener esa parte dentro de nuestra intimidad.
Esta peque ya ha demostrado mucha personalidad incluso dentro de mí, se mueve muchísimo, se ha girado cuando ha querido (después de lo esperado) parece que va a ser grande y fuerte y creo que será una compañera estupenda de juegos y vida para su hermano. Así que quería escoger un nombre a la altura de mi niña. No es tarea fácil tomar una decisión así, ¿verdad?
Parece mentira que haya tardado tanto en decidirme porque tengo la sensación de que este nombre estaba ya escogido desde hace tiempo, muchas señales y pistas que yo misma me he dado pero que no he querido ver…
Hace unas semanas escogí un vinilo para decorar su habitación ¿te acuerdas de cuál fue? el escogido fue este de Peter Pan, que aunque no sale ella, sí que pertenece a ese mundo (esta es la segunda pista que me di a mí misma, porque la primera llegó incluso antes del embarazo)

El nuestro es en otro color
La primera pista llegó en octubre del año pasado, justo en el mes que me quedé embarazada después de una búsqueda más larga de lo que me hubiese gustado. Encontré una acuarela de Esther Gili que me enamoró completamente, me pareció inspiradora, esa mirada me parecía que decía tantísimas cosas… Soy muy poco consumista, no soy de comprar muchas cosas y menos cosas de decoración, pero cuando sacaron a la venta láminas numeradas en Tutete no me pude resistir y desde entonces está aquí conmigo.
Tigrilla será mi niña, mi musa, una princesa distinta, valiente e inspiradora. Este será su nombre blogueril y en unos días se unirá a las aventuras de su hermano Brutote.
¿Qué te parece nuestra elección?
¡Hasta la próxima!
Me encanta!!! Por favor que tierno!!
Me encanta mami!!!
Me encanta el nombre que has escogido. Es muy revelador porque Tigrilla es cabezota, orgullosa, valiente… Todo lo que necesita la peque para convivir con su hermano jajaja
Y para darte entre los dos muchas alegrías y dolores de cabeza jajaja
Estoy deseando que la tengas en brazos ainss
Que ternura, de verdad.
Por cierto, la lámina es preciosísima